La Cuna de Judas

La Cuna de Judas es una pirámide pesada de madera suspendida sobre 4 patas como una banqueta, hay un sistema con varias cuerdas y poleas sobre la pirámide que están conectadas al torso y a los pies de la victima. Los orejes acusados cuelgan desnudos, sobre la pirámide. Los torturadores tienen varias técnicas para usar este aparato: pueden dejar caer a la victima sobre la pirámide o pueden bajarla lentamente hasta quedar sentado sobre la pirámide por un largo período.
Cuando la gravedad actúa sobre la víctima y la ala hacia abajo, la pirámide actúa como una herramienta separadora, las cuatro esquinas disminuirán la cantidad de fricción y creará un movimiento casi de deslizamiento que ayuda a abrir la victima ya que los lados lisos funcionan como abrazaderas para mantener abierta a la victima.

Para la inquisición española, obtener la confesión de los sospechosos era solo el comienzo. Los inquisidores dejaban a las victimas en la Cuna de Judas hasta que traicionaran a todos sus compañeros conspiradores.

Durante el interrogatorio si la victima no cooperaba, la dejaban sentada durante horas, eso se llamaba la posición de vigilias porque los músculos se contraen tratando de minimizar el dolor.

Su nombre se debe a Judas, que traicionó a Jesús, con las autoridades romanas.
Es un nombre apropiado porque cualquiera que sufriera ese dolor insoportable daría información sobre cualquier cosa o persona.

La Doncella de Hierro

Posiblemente la primera doncella de hierro fue construida en Núremberg, Alemania. La doncella de hierro de Núremberg fue construida en el siglo XIX, en la Edad Media.

La Doncella de Hierro, estaba hecha de madera con herrajes de metal repujado el diseño era de una figura femenina. Con una cara que se podría reconocer como la virgen María y un cuerpo formado por dos puertas que lo asemejaban a un ataúd. Medía más de dos metrosde alto y casi uno de ancho, por lo que era suficientemente grande para contener a un hombre plenamente desarrollado.

Esa replica de 200 años cuenta con un marco de madera envuelto en metal con púas de hierro de 20 centímetros. Las púas estaban hechas de metal, pero la Doncella se construía de madera, esto permitía que las púas fuesen movidas del lugar de forma predeterminada. Las puertas giraban sobre bisagras como las puertas comunes. Los verdugos podían aplicar distintos puntos de presión al cerrar la puerta para crear heridas penetrantes de distintas profundidades. Si las púas se colocaban para perforar órganos no vitales ellas sellarían los agujeros hechos en el cuerpo, solo cuando la persona fuese sacada sangraría profusamente.
Los verdugos introducían a un blasfemo o criminal en el interior de La Doncella, a medidas que las puertas se cerraban, filosas púas penetraban al acusado. La espera por la confesión podría extenderse por horas, pero la Doncella de Hierro era una sentencia a muerte. El inquisidor o el verdugo esperaba a que la víctima (acusado) confesara sus pecados y estos fuesen perdonados antes de morir.
Con las púas colocadas en órganos no vitales podría pasar mucho tiempo antes de morir y la agonía seria realmente espantosa.
Si se quería una muerte rápida se colocaban las púas en la garganta, ojos o corazón, causando una muerte rápida y dolorosa.

La última Doncella de Hierro construida por la inquisición desapareció durante un bombardeo aliado sobre Alemania durante la segunda guerra mundial.